La reciente designación del centro histórico de Ciudad Victoria como Barrio Mágico por la Secretaría de Turismo Federal ha despertado preocupaciones entre la comunidad local. Aunque el reconocimiento busca promover el turismo y el desarrollo económico, existe el temor de que los recursos asignados sean monopolizados por la élite de la ciudad.
Vecinos y activistas denuncian que la clase dorada ya se prepara para acaparar los fondos destinados al embellecimiento y promoción de la zona. Esta situación podría perpetuar la desigualdad, beneficiando a unos pocos en lugar de fomentar un crecimiento inclusivo que impacte positivamente a toda la comunidad.
Los principales afectados son los comerciantes que se localizan en el Mercado Arguelles y sus alrededores. El recurso, que esperaban resultara para una remodelación parecida al mercado municipal de Tampico, no va a ser.
Los empresarios de apellidos ilustres, como Charur, Etienne, Villarreal, Filizola, Caballero, entre otros, conocidos ya como la Clase Dorada, se encuentran cabildeando ante el Gobierno de Tamaulipas y la alcaldía que el dinero se invierta principalmente en la Calle Hidalgo, lo que antes era conocido como Zona Rosa, ya que son propietarios de inmuebles en ese sector.
Se hace un llamado a la transparencia y a la vigilancia ciudadana para garantizar que los recursos se utilicen de manera equitativa. Es fundamental que los proyectos se ejecuten con una visión inclusiva, asegurando que todos los residentes de Ciudad Victoria se beneficien de esta importante distinción.
